Pasó su infancia y juventud en los pueblos de Preobrazhenskoye e Izmailovskoye, cerca de Moscú, gracias a lo cual Moscú y sus alrededores permanecieron cerca de ella durante toda su vida. Su educación se limitó a la formación en danza, discurso secular y francés; siendo ya emperatriz, se sorprendió mucho al saber que "Gran Bretaña es una isla". Declarada adulta en 1722, Isabel se convirtió en el centro de diversos proyectos diplomáticos. Pedro el Grande pensó en casarla con Luis XV; Cuando este plan fracasó, la princesa comenzó a ser cortejada por príncipes alemanes menores, hasta que se decantaron por el Príncipe de Holstein, Karl-August, a quien logró gustar mucho. La muerte del novio trastornó este matrimonio y, tras la muerte de Catalina I, que se produjo poco después, las preocupaciones sobre el matrimonio de Isabel cesaron por completo.

Abandonada a sí misma durante el reinado de Pedro II, vivaz, amigable, capaz de decir una palabra amable a todos, y también prominente y esbelta, con un hermoso rostro, la princesa se entregó por completo al torbellino de diversión y pasatiempos. Se hizo amiga del joven emperador, contribuyendo así a la caída de Ménshikov y, al mismo tiempo, se rodeó. "aleatorio" personas como A. B. Buturlin y A. Ya. Con el ascenso al trono de la imperiosa y desconfiada Anna Ioannovna, Isabel perdió su brillante posición en la corte y se vio obligada a vivir casi para siempre en su propiedad, Aleksandrovskaya Sloboda, retirándose en un círculo cercano de personas devotas a ella, entre las cuales, desde En 1733, el primer lugar lo ocupó Alexey Razumovsky.

Alumna del tutor francés Rambourg e hija obediente de su confesor, el padre Dubyansky, pasaba su tiempo en interminables bailes y servicios religiosos, preocupándose por la moda parisina y la cocina rusa, constantemente necesitada de dinero, a pesar de los grandes fondos. La total indiferencia hacia la política y la incapacidad para intrigar, junto con la existencia en el extranjero del nieto de Pedro el Grande, el Príncipe de Holstein, salvaron a Isabel de ser tonsurada en un monasterio y de casarse con el duque de Sajonia-Coburgo-Meiningen, pero estallaron grandes disgustos. entre ella más de una vez.

La posición de la princesa no mejoró con su traslado a San Petersburgo bajo Juan VI, aunque Biron, aparentemente, la favoreció y aumentó la asignación que le otorgaba el tesoro. Pero ahora la propia sociedad se ha encargado de cambiar el destino de Isabel. La dominación de 10 años de los alemanes bajo Anna Ioannovna y Anna Leopoldovna dio lugar a un descontento general, cuya expresión activa fue la guardia, que sirvió como una fuerte ciudadela de la nobleza rusa. El sentimiento nacional, indignado por la opresión de lo extranjero, nos hizo soñar con un regreso a los tiempos de Pedro el Grande; El duro orden establecido por el Transformador fue idealizado y la princesa Isabel comenzó a parecer capaz de llevar a Rusia de regreso al antiguo camino.

Cuando el régimen creado en 1730 comenzó a desintegrarse y los gobernantes alemanes comenzaron a devorarse unos a otros, aparecieron signos de abierto malestar entre los guardias. El embajador francés Chetardy y el embajador sueco, el barón Nolken, intentaron aprovechar este estado de ánimo. Al entronizar a Isabel, el primero pensó en distraer a Rusia de la alianza con Austria, y el segundo, en devolver a Suecia las tierras conquistadas por Pedro el Grande. El intermediario entre los residentes extranjeros e Isabel fue su médico Lestocq. La indecisión de Shetardy y las excesivas pretensiones de Nolken obligaron, sin embargo, a Isabel a interrumpir las negociaciones con ellos, lo que se hizo imposible porque los suecos declararon la guerra al gobierno de Anna Leopoldovna, con el pretexto de proteger los derechos al trono del hijo de Anna Petrovna, el duque. de Holstein, el futuro emperador Pedro III. Pero la marcha de parte de los regimientos de guardias y la intención de Anna Leopoldovna de arrestar a Lestocq impulsaron a Isabel a darse prisa y dar un paso decisivo. A las 2 de la madrugada del 25 de noviembre de 1741, ella, acompañada de personas cercanas a ella, se presentó en la compañía de granaderos Preobrazhensky y, recordando de quién era hija, ordenó a los soldados que la siguieran, prohibiéndoles usar armas, ya que amenazaban con matar. todos los alemanes. El arresto de la familia Brunswick se produjo muy rápidamente, sin causar ningún derramamiento de sangre, y al día siguiente apareció un manifiesto que anunciaba brevemente el ascenso de Isabel al trono.

Esta revolución dio lugar a una verdadera explosión de sentimiento nacional en la sociedad. El periodismo de esa época (odas de bienvenida y sermones de la iglesia) estaba lleno de bilis y críticas airadas de la época anterior, con sus gobernantes alemanes, y elogios igualmente inmoderados a Isabel como la conquistadora del elemento extranjero. La calle mostraba los mismos sentimientos, pero de forma más áspera. Las casas de muchos extranjeros en San Petersburgo fueron destruidas y en el ejército enviado a Finlandia se produjo casi un exterminio total de los oficiales extranjeros. Convencida de la total aprobación de la sociedad por el cambio ocurrido, Isabel emitió otro manifiesto el 28 de noviembre, donde demostraba detalladamente y sin pelos en la lengua la ilegalidad de los derechos de Juan VI al trono y lanzaba una serie de acusaciones contra el alemán. trabajadores temporales y sus amigos rusos. Todos ellos fueron sometidos a juicio, que condenó a Osterman y Munnich a muerte en acuartelamiento, y a Levenvold, Mengden y Golovkin simplemente a la pena de muerte. Conducidos al patíbulo, fueron perdonados y desterrados a Siberia.

Habiéndose asegurado el poder, Isabel se apresuró a recompensar a las personas que contribuyeron a su ascenso al trono o que en general le eran leales, y a formar un nuevo gobierno a partir de ellas. La compañía de granaderos del regimiento Preobrazhensky recibió el nombre de Campaña de Vida. Los soldados que no pertenecían a la nobleza fueron alistados como nobles, los cabos, sargentos y oficiales fueron ascendidos a rango. A todos ellos, además, se les concedieron tierras procedentes principalmente de propiedades confiscadas a extranjeros. De las personas cercanas a Isabel, Alexei Razumovsky, el marido morganático de la emperatriz, elevado a la dignidad de conde y nombrado mariscal de campo y caballero de todas las órdenes, y Lestocq, que también recibió el título de conde y vastas tierras, fueron especialmente colmado de favores. Pero el médico francés y el pequeño cosaco ruso no se convirtieron en estadistas destacados: el primero no conocía Rusia y, por lo tanto, participó únicamente en los asuntos exteriores, y aun así no por mucho tiempo, ya que en 1748 cayó en desgracia por sus duras expresiones sobre Isabel y fue exiliado a Ustyug; el segundo se retiró deliberadamente de una participación seria en la vida estatal, sintiéndose no preparado para el papel de gobernante. Los primeros lugares del nuevo gobierno los ocuparon, pues, representantes de ese grupo social que, en nombre del sentimiento nacional ofendido, derrocó al régimen alemán. Muchos de ellos eran simples oficiales de la guardia antes del golpe, como los antiguos sirvientes de Isabel, P.I. Shuvalov y M.I. Vorontsov, que ahora, junto con sus familiares, adquirieron la mayor importancia en el entorno gubernamental. Junto a ellos llegaron al poder algunas figuras de gobiernos anteriores, por ejemplo A.P. Bestuzhev-Ryumin, el príncipe A.M. Cherkassky y el príncipe N.Yubetskoy, que cayeron en desgracia o no desempeñaron un papel independiente en los dos reinados anteriores. .

Al principio, después de ascender al trono, la propia Isabel participó activamente en los asuntos estatales. Reverenciando la memoria de su padre, quiso gobernar el país en el espíritu de sus tradiciones, pero se limitó a abolir únicamente el gabinete de ministros, del cual, como decía el decreto personal, “Ha habido una omisión considerable de casos y la justicia se ha vuelto completamente débil”, y la devolución al Senado de sus derechos anteriores relacionados con la restauración de la fiscalía, el magistrado principal y los colegios Berg y Manufacturing.

Después de estos primeros pasos, Isabel, retirándose casi por completo a la vida cortesana, con sus diversiones e intrigas, transfirió la dirección del imperio a manos de sus empleados; Sólo de vez en cuando, entre la caza, la misa y el baile, prestaba un poco de atención a la política exterior. Para llevar a cabo este último y en parte para considerar las cuestiones militares y financieras relacionadas con él, ya un mes después del golpe, surgió un consejo no oficial bajo la dirección de la emperatriz entre sus más cercanos, que luego fue convocado una conferencia en el tribunal más alto. Este consejo no limitó en absoluto al Senado, ya que muchos, y además los miembros más influyentes del primero, también fueron incluidos en el segundo, y los intentos del Canciller Bestuzhev en 1747 y 1757. Isabel rechazó convertirlo en una institución similar al consejo privado supremo o al gabinete de ministros.

Más que nadie, Isabel también estaba interesada en la cuestión de la sucesión al trono, que se agudizó especialmente después del oscuro caso de N.F. Lopukhina, inflado por las intrigas de Lestocq, y la negativa de Anna Leopoldovna a renunciar a sus derechos al trono por sus hijos. Para calmar los ánimos, Isabel convocó a San Petersburgo a su sobrino, Karl-Peter-Ulrich, quien fue proclamado heredero al trono el 7 de noviembre de 1742. Mientras tanto, proporcionó al Senado, cuyos miembros eran, sin excepción, representantes "noble nobleza rusa" La política interior se desvió bruscamente del camino que la habían puesto las primeras órdenes de la nueva emperatriz. Los dignatarios reunidos en el Senado, encabezados por los Vorontsov y Shuvalov, ya no pensaban en una mayor restauración del orden de Pedro, en la implementación de la idea de un estado policial con una monarquía ilimitada, llevada a cabo por una burocracia sin clases, que animó el transformador. No esta idea, sino el sentimiento nacional y los intereses de clase noble se convirtieron ahora en los principales incentivos para la actividad gubernamental, a lo que se añadió la tradicional necesidad de encargarse de reponer el tesoro con fondos suficientes para mantener la corte, los funcionarios y el ejército.

El nuevo gobierno no tenía ningún programa para reformas importantes del sistema político. La cuestión de esto, sin embargo, se planteó dos veces: I. I. Shuvalov le dio a Elizabeth una nota "sobre las leyes fundamentales" y P.I. Shuvalov presentaron al Senado sobre los beneficios para el estado. "libre conocimiento de las opiniones de la sociedad". Pero estos proyectos no recibieron más movimiento, ya que la nobleza, habiendo logrado participar en las actividades gubernamentales, ya no pensó, como en 1730, en limitar formalmente el poder supremo. Pero el gobierno, en su práctica diaria, cumplió con éxito otras aspiraciones de la nobleza que declaró tras el ascenso al trono de Anna Ioannovna.

En primer lugar, el servicio público se convirtió en un privilegio sólo para los nobles. Durante el reinado de Isabel, con la excepción de los Razumovsky, no apareció ni un solo estadista que procediera de los estratos más bajos de la sociedad, como era casi la norma bajo Pedro el Grande. Incluso los extranjeros eran tolerados en el servicio sólo cuando por alguna razón no había nobles rusos capaces o conocedores. Esto hizo posible que los alemanes permanecieran en el campo diplomático. Al mismo tiempo, el servicio a los nobles se hizo más fácil. La ley de servicio de 25 años, promulgada en 1735 y ahora suspendida, está ahora en plena vigencia. La práctica, además, legitimó que los nobles realmente completaran su servicio de 25 años en un período mucho más corto, ya que el gobierno les permitió generosamente licencias preferenciales y de larga duración, que estaban tan arraigadas que en 1756 - 1757. fue necesario recurrir a medidas drásticas para obligar a los oficiales que vivían en sus propiedades a presentarse ante el ejército. En la misma época, se extendió entre la nobleza la costumbre de alistarse en regimientos cuando aún era un niño y así alcanzar el rango de oficial mucho antes de la edad adulta.

En la década de 1750, se estaba preparando en el Senado un decreto sobre la exención total de los nobles del servicio público, que fue emitido accidentalmente sólo por el sucesor de Isabel. La fiscalía restaurada no tenía la misma fuerza, por lo que el servicio, de una tarea a veces pesada, comenzó a adquirir el carácter de una ocupación rentable. Esto se aplica especialmente a los gobernadores, que en ese momento pasaron a ser permanentes.

El látigo, la ejecución y la confiscación de propiedades que siguieron bajo Pedro el Grande y Anna Ioannovna por malversación y soborno fueron reemplazados ahora por la degradación, el traslado a otro lugar y rara vez el despido. La moral administrativa, en ausencia de control y miedo al castigo, ha caído extremadamente bajo. “Las leyes”, admitió la propia Isabel, “no son aplicadas por enemigos comunes internos. La insaciable codicia del interés propio ha llegado a tal punto que algunos lugares establecidos para la justicia se han convertido en mercados, la codicia y la parcialidad en el liderazgo de los jueces, la connivencia. y omisión como aprobación de la ilegalidad”. El crecimiento del elemento de clase en la administración central y regional se vio mitigado, sin embargo, por el hecho de que en los años 40 del siglo XVIII el organismo nacional, en general, había hecho frente a las consecuencias de la crisis financiera de Pedro el Grande.

Durante el reinado de Isabel, los impuestos se pagaban con más regularidad que antes, se redujeron los atrasos y la cantidad de dinero per cápita se redujo de 2 a 5 kopeks per cápita. El manifiesto de 1752, que perdonaba la escasez de dos millones y medio per cápita que se había producido entre 1724 y 1747, anunciaba públicamente que el imperio había alcanzado tal prosperidad que en ingresos y población "Se supera casi una quinta parte del estado anterior." Por tanto, se empezó a practicar una cierta suavidad en los métodos de influencia administrativa sobre la población, especialmente en comparación con la exigencia y crueldad de la administración durante el régimen alemán. Bajo Isabel, la nobleza logró no menos éxito en la conquista de la tierra y el trabajo campesino.

La generosa distribución de propiedades entre los defensores de la vida, los favoritos y sus familiares, así como entre los estadistas honrados e inmerecidos, amplió significativamente la servidumbre, que, según el decreto del 14 de marzo de 1746, prohibía a los no nobles. "comprar gente y campesinos sin tierra y con tierra" y que recibió incluso fuerza retroactiva en las instrucciones de límites de 1754 y el decreto de 1758, pasó a ser privilegio exclusivo de la nobleza. Varias medidas aumentaron la severidad de la servidumbre. Habiendo retirado a los campesinos del juramento en el mismo momento de la ascensión de Isabel al trono, el gobierno los consideró esclavos y posteriormente puso en práctica enérgicamente esta opinión.

Un decreto del 2 de julio de 1742 prohibía a los campesinos terratenientes entrar voluntariamente al servicio militar, quitándoles así la única oportunidad de salir de la servidumbre, y la instrucción de límites del mismo año ordenaba a todos los plebeyos, ilegítimos y libertos a alistarse como posads o como soldados, o para los terratenientes, amenazando de lo contrario con el exilio a la región de Orenburg o con el envío a trabajar en fábricas estatales. Los mismos derechos de los terratenientes sobre los campesinos se incrementaron significativamente mediante decretos del 4 de diciembre de 1747, 2 de mayo de 1758 y 13 de diciembre de 1760. Según el primero, la nobleza podía vender gente del patio y campesinos para ser reclutados, lo que legitimaba la trata de personas. que ya estaba muy extendida en tallas anchas; el segundo autorizó a los terratenientes a controlar el comportamiento de sus siervos, y el tercero les dio el derecho de exiliar a los campesinos y sirvientes infractores a Siberia, y el tesoro acreditaba a los exiliados como reclutas, y con ello dio a la arbitrariedad de los terratenientes una especie de carácter oficial. . Medidas en forma de permiso para que los campesinos, sin importar de quién fueran, según el decreto de 1745, comerciaran mercancías en aldeas y aldeas y, según el decreto del 13 de febrero de 1748, se unieran a la clase mercantil, sujeto a la El pago de impuestos comerciales junto con el pago del impuesto de capitación y quitrents, por supuesto, no contradecía la dirección general de la legislación, ya que los beneficios brindados a los campesinos, mejorando su condición económica, eran beneficiosos para los terratenientes.

El bienestar material de la nobleza era generalmente un objeto importante para las preocupaciones directas del gobierno. Así, por decreto del 7 de mayo de 1753, se creó un banco noble en San Petersburgo, con una sucursal en Moscú, que proporcionaba a los nobles préstamos baratos (al 6% anual) en cantidades bastante grandes (hasta 10.000 rublos). Con el mismo propósito, según instrucciones del 13 de mayo de 1754, se llevó a cabo un estudio general de la tierra, pero fue recibido con gran hostilidad por parte de la nobleza y, como resultado, pronto fue suspendido. Habiendo hecho de la servidumbre un privilegio noble y dado casi el mismo carácter a la función pública, el gobierno de Isabel tomó medidas para transformar a la nobleza en una clase más cerrada. Desde 1756, el Senado, mediante una serie de decretos, determinó que sólo las personas que presentaran pruebas de su origen noble podían ser incluidas en las listas de nobleza. Fue sobre esta base que en 1761 se empezó a compilar un nuevo libro de genealogía. Decretos del Senado 1758 - 1760 Separaron aún más claramente a los nobles personales de los hereditarios, privando a los no nobles ascendidos a los rangos de oficiales principales, que, desde la época de Pedro el Grande, les otorgaban nobleza, el derecho a poseer propiedades pobladas.

Las medidas del gobierno de Isabel, que parecían perseguir objetivos nacionales, la división de Rusia en 1757 en 5 distritos, de los cuales los reclutas se retiraban alternativamente después de 4 años en 5, y el establecimiento en 1743 de un período de 15 años para controlar el impuesto. En esencia, la coloración de clases y los propios decretos estaban motivados principalmente por los intereses de los terratenientes. Incluso la mayor reforma financiera del reinado, la abolición de las aduanas internas en 1754, en la que S. M. Soloviev vio la destrucción de los últimos vestigios de una época específica, fue considerada por su iniciador, P. I. Shuvalov, desde el punto de vista de la nobleza: de su implementación esperó el desarrollo del comercio campesino beneficioso para la nobleza. La política de clase noble del gobierno de Isabel tuvo un impacto particularmente claro en las actividades de la institución, que parecía haber sido creada exclusivamente en interés de los comerciantes. Inaugurado para las necesidades de este último en 1754, comercial o "cobre" En la práctica, el banco proporcionaba amplio crédito casi únicamente a los nobles, desde altos dignatarios hasta oficiales de la guardia.

El patrimonio no podía dejar de afectar las actividades generalmente venerables del gobierno de Isabel en el campo de la educación. En 1747, se desarrollaron nuevas regulaciones para la Academia de Ciencias de San Petersburgo con la participación de K. Razumovsky, nombrado presidente en 1746. En 1755, se fundó una nueva universidad en Moscú, según el proyecto de I. I. Shuvalov y M. V. Lomonosov, y bajo ella se abrieron dos gimnasios y uno en Kazán. Aunque a ambas universidades podían asistir personas de todas las condiciones, excepto los impuestos, solo la nobleza lo aprovechó ampliamente, y ya a mediados del siglo XVIII. comprendieron la necesidad de iluminación mejor que otros segmentos de la sociedad. El gobierno de Isabel cumplió con esta aspiración de la nobleza a medio camino con sus preocupaciones sobre el desarrollo de instituciones educativas puramente nobles: el cuerpo de la nobleza terrateniente, la academia de artillería y, especialmente, las escuelas universitarias. Este tipo de eventos educativos eran absolutamente necesarios en una época en la que, bajo la influencia de la dominación experimentada de los extranjeros bajo Anna Ioannovna, se desarrolló fuertemente el espíritu de intolerancia nacional-religiosa y hostilidad hacia la educación de Europa occidental, especialmente entre el clero. Gracias a los hermanos Razumovsky, que se inclinaron ante la memoria de San Pedro. Yavorsky, los niveles más altos de la jerarquía estaban ahora ocupados por personas imbuidas de odio hacia las aspiraciones educativas de Feofan Prokopovich, quien reinó indiscutiblemente en el sínodo bajo Anna Ioannovna.

Aparecieron varios predicadores que vieron en Minich y Osterman a emisarios de Satanás enviados para destruir la fe ortodoxa. En este campo, el abad del monasterio de Sviyazhsk, Dm. Sechenov y Ambrose Yushkevich. Esta actitud hacia "a los alemanes" Y "Alemán" La cultura no tardó en manifestarse en la realidad. Habiendo recibido la censura en sus manos, el Sínodo presentó a la más alta firma, en 1743, un proyecto de decreto que prohibía la importación de libros a Rusia sin su examen previo. Bestúzhev-Ryumin se rebeló enérgicamente contra esto, pero Isabel no siguió su consejo y obras como el libro de Fontenelle "Acerca de muchos mundos" y publicado bajo Pedro el Grande "Pheatron o la vergüenza histórica", traducido por G. Buzhansky, comenzó a ser prohibido. Pero el libro es caro para el sínodo "Piedra de la fe" fue impreso. Algunos de los jerarcas tenían una actitud negativa no sólo hacia la ciencia secular, sino también hacia la educación de la iglesia. El arzobispo de Arkhangelsk, Barsanuphius, se pronunció, por ejemplo, en contra de la gran escuela construida en Arkhangelsk, alegando que los obispos de Cherkasy amaban las escuelas. Cuando las autoinmolaciones fanáticas se intensificaron entre los cismáticos, esos pastores sólo pudieron recurrir a las autoridades gubernamentales. Este último, representado por el Senado, era consciente del nivel anormalmente bajo de educación del clero e hizo algo para elevarlo. Este nivel se reflejó claramente en la posición que asumió el Sínodo sobre la cuestión de la mitigación de las penas penales: cuando los decretos de 1753 y 1754, promulgados por iniciativa personal de la emperatriz, abolieron la pena de muerte, así como la tortura en los casos de taberna. , el Senado presentó un informe sobre la exención de la tortura a los delincuentes hasta los 17 años, pero los miembros del sínodo se rebelaron contra esto, argumentando que la infancia, según las enseñanzas de los Santos Padres, se consideraba hasta los 12 años. ; olvidaron que las regulaciones a las que se referían se aplicaban a la población de los países del sur, que alcanzaba la edad adulta mucho antes que los del norte.

Las actividades educativas del gobierno de Isabel, dictadas sobre todo por los intereses de la nobleza, jugaron sin embargo un papel importante en la asimilación de la cultura de Europa occidental por parte de los rusos, cuyos poderosos directores fueron la academia, la universidad y el primer teatro público. , inaugurado por el tesoro por iniciativa de Volkov y Sumarokov en 1756.

Los intereses exclusivamente estatales guiaron al gobierno de Isabel sólo en el campo de la política exterior y periférica. La primera Novorossiya, como resultado de los graves disturbios de los Bashkirs, se convirtió en 1744 en la provincia de Orenburg, que también incluía la provincia de Ufa y el distrito de Stavropol de la actual provincia de Samara. La pacificación de los extranjeros, el asentamiento de la región por parte de los rusos y su establecimiento recayeron en la suerte del talentoso y honesto Neplyuev. Siberia, donde también había fermentación entre los extranjeros, también tenía un administrador concienzudo en la persona de la víctima del caso Volynsky, Soymonov. Los chukchi y koryaks incluso amenazaron con exterminar por completo a los colonos rusos en las cercanías de Okhotsk. Los destacamentos enviados contra ellos encontraron una feroz resistencia, y los koryaks, por ejemplo, prefirieron en 1752 quemarse voluntariamente en un fuerte de madera antes que rendirse a los rusos. La Pequeña Rusia también inspiró un gran temor, donde se había extendido un fuerte descontento con el gobierno del Colegio de la Pequeña Rusia establecido por Pedro el Grande.

Habiendo visitado Kiev en 1744, Isabel decidió, para calmar a la población, restaurar el hetmanismo. Elegido ante la insistencia del gobierno hetman, K. Razumovsky, sin embargo, comprendió que los días del hetmanato ya habían terminado y, por lo tanto, insistió en transferir los asuntos de la junta cerrada al Senado, en el que la ciudad de Kiev comenzó a controlar directamente. depender. También se acercaba el fin de Zaporozhye Sich, ya que durante el reinado de Isabel continuó enérgicamente la convocatoria de nuevos colonos a las estepas del sur de Rusia. En 1750, se fundaron varios asentamientos serbios llamados Nueva Serbia en lo que hoy es la provincia de Kherson, a partir de los cuales se formaron dos regimientos de húsares. Posteriormente surgieron nuevos asentamientos serbios en la actual provincia de Ekaterinoslav, que fueron llamados Slavic-Serbia. Cerca de la fortaleza de Santa Isabel, se formaron asentamientos de pequeños rusos polacos, moldavos y cismáticos, que sentaron las bases para la línea Novoslobodskaya. Así, Zaporozhye fue cubierta gradualmente por la ya emergente segunda Novorossiya.

En el ámbito de la política exterior, el gobierno de Isabel siguió en general el camino indicado en parte por Pedro el Grande, en parte dependiendo de la posición de entonces de los principales estados de Europa occidental. Tras su ascenso al trono, Isabel encontró a Rusia en guerra con Suecia y bajo la fuerte influencia de Francia, una Austria hostil. La paz de Abo en 1743 le dio a Rusia la provincia de Kymenegor, y la asistencia militar brindada al partido Holstein llevó al hecho de que Adolf Friedrich, el tío de la heredera de Isabel Petrovna, fuera declarado heredero del trono sueco. El arresto de Lestocq en 1748 eliminó la influencia francesa en la corte, que todavía contaba con el apoyo de los Shuvalov. Habiendo alcanzado una posición excepcional, Bestuzhev-Ryumin fue restaurador "El sistema de Pedro el Grande", que veía en amistad con Inglaterra y en alianza con Austria. A petición del primero, Rusia participó en la Guerra de Sucesión de Austria. Mientras tanto, el rápido ascenso de Prusia dio lugar a un acercamiento entre Austria y Francia, que hasta entonces habían competido entre sí, lo que llevó a la formación de una coalición que incluía a Rusia. En la guerra que se abrió contra Federico II en 1757, las tropas rusas jugaron un papel importante en la conquista de Prusia Oriental y Königsberg, pero la muerte de Isabel no permitió que estas tierras se consolidaran para Rusia.

Tercera emperatriz de toda Rusia 25 de noviembre (6 de diciembre) 1741 - 25 de diciembre de 1761 (5 de enero de 1762)
Coronación:
Predecesor:
Sucesor:
Nacimiento:
Dinastía:	Romanov (Welphs)
	Catalina I
	A. G. Razumovsky
Autógrafo:
Monograma:

Antes del ascenso al trono

Adhesión al trono

Reinado

Malestar social

La política exterior

Guerra de los Siete Años (1756-1763)

Vida personal

Sucesión al trono

Datos interesantes

Literatura

Datos interesantes

(18 (29) de diciembre de 1709, Kolomenskoye - 25 de diciembre de 1761 (5 de enero de 1762), San Petersburgo) - emperatriz rusa del 25 de noviembre (6 de diciembre) de 1741 de la dinastía Romanov, hija de Pedro I y su amante Ekaterina Alekseevna (futura emperatriz Catalina I).

Infancia, educación y crianza.

Isabel nació en el pueblo de Kolomenskoye el 18 de diciembre de 1709. Este día fue solemne: Pedro I entré en Moscú, queriendo celebrar su victoria sobre Carlos XII en la antigua capital; Tras él trajeron prisioneros suecos. El emperador tenía la intención de celebrar inmediatamente la victoria de Poltava, pero al entrar en la capital fue notificado del nacimiento de su hija. "Dejemos a un lado la celebración de la victoria y apresurémonos a felicitar a mi hija por su entrada al mundo", dijo. Pedro encontró a Catalina y al bebé recién nacido sanos y celebró con un banquete.

Con sólo ocho años, la princesa Isabel ya llamaba la atención por su belleza. En 1717, ambas hijas, Ana e Isabel, saludaron a Pedro que regresaba del extranjero, vestidas con atuendo español. Entonces el embajador francés notó que la hija menor del soberano lucía inusualmente hermosa con este traje. Al año siguiente, 1718, se introdujeron las asambleas, y ambas princesas aparecieron allí con vestidos de diferentes colores, bordados en oro y plata, y con tocados relucientes de diamantes. Todos admiraban las habilidades de baile de Elizabeth. Además de su facilidad de movimiento, se distinguía por su ingenio e ingenio, inventando constantemente nuevas figuras. El enviado francés Levi señaló al mismo tiempo que Isabel podría ser considerada una belleza perfecta si su cabello no fuera rojizo.

La educación de la princesa no pudo haber sido particularmente exitosa, especialmente porque su madre era completamente analfabeta. Pero le enseñaron en francés y Catherine insistía constantemente en que había razones importantes para que ella supiera francés mejor que otras materias. Esta razón, como se sabe, fue el fuerte deseo de sus padres de casar a Isabel con una persona de sangre real francesa. Sin embargo, respondieron a todas las propuestas persistentes de relacionarse con los Borbones franceses con una negativa cortés pero decisiva.

En todos los demás aspectos, la educación de Isabel no fue muy onerosa; nunca recibió una educación sistemática decente. Su tiempo lo ocupaba montar a caballo, cazar, remar y cuidar su belleza.

Antes del ascenso al trono

Después del matrimonio de sus padres, llevó el título de princesa. El testamento de Catalina I de 1727 preveía los derechos de Isabel y sus descendientes al trono después de Pedro II y Anna Petrovna. En el último año del reinado de Catalina I y al comienzo del reinado de Pedro II, se habló mucho en la corte sobre la posibilidad de un matrimonio entre una tía y un sobrino, que en ese momento estaban unidos por relaciones amistosas. tiempo. Después de la muerte de Pedro II, prometido con Catalina Dolgorukova, a causa de la viruela en enero de 1730, Isabel, a pesar de la voluntad de Catalina I, no fue considerada como una de las aspirantes al trono, que fue transferido a su prima Anna Ioannovna. Durante su reinado (1730-1740), la zarevna Isabel cayó en desgracia; Los descontentos con Anna Ioannovna y Biron tenían grandes esperanzas en la hija de Pedro el Grande.

Adhesión al trono

Aprovechando el declive de la autoridad y la influencia del poder durante la regencia de Anna Leopoldovna, en la noche del 25 de noviembre (6 de diciembre) de 1741, Isabel, de 32 años, acompañada por el conde M.I Vorontsov, el médico Lestocq y su profesor de música. Schwartz, dijo “¡Chicos! ¡Sabes de quién soy hija, sígueme! ¡Así como serviste a mi padre, así me servirás a mí con tu lealtad! levantó detrás de ella la compañía de granaderos del Regimiento Preobrazhensky. Al no encontrar resistencia, con la ayuda de 308 guardias leales, se proclamó nueva reina, ordenando el encarcelamiento del joven Iván VI en la fortaleza y el arresto de toda la familia Brunswick (parientes de Anna Ioannovna, incluido el regente de Ivan VI, Anna Leopoldovna) y sus seguidores. Los favoritos de la ex emperatriz Minich, Levenwolde y Osterman fueron condenados a muerte y sustituidos por el exilio a Siberia, para mostrar a Europa la tolerancia del nuevo autócrata.

Reinado

Isabel casi no participó en los asuntos estatales y los confió a sus favoritos: los hermanos Razumovsky, Shuvalov, Vorontsov, A.P. Bestuzhev-Ryumin.

Isabel proclamó el regreso a las reformas de Pedro como principios básicos de la política interior y exterior. Se restableció el papel del Senado, el Berg and Manufactory Collegium y el Magistrado Principal. Se abolió el Gabinete de Ministros. El Senado recibió el derecho de iniciativa legislativa. Durante la Guerra de los Siete Años, surgió una reunión permanente encima del Senado: la Conferencia del Tribunal Supremo. A la conferencia asistieron los jefes de los departamentos militar y diplomático, así como personas especialmente invitadas por la Emperatriz. Las actividades de la Cancillería Secreta se volvieron invisibles. La importancia del Sínodo y del clero aumentó (el confesor de la emperatriz, Fyodor Dubyansky, adquirió una influencia especial en la corte) y los cismáticos fueron brutalmente perseguidos. El Sínodo se ocupó del apoyo material del clero, los monasterios y de la difusión de la educación espiritual entre el pueblo. Durante el reinado de Isabel, se completó el trabajo sobre una nueva traducción eslava de la Biblia, iniciado bajo Pedro I en 1712. La Biblia isabelina, publicada en 1751, todavía se utiliza en el culto de la Iglesia Ortodoxa Rusa con cambios menores.

En 1741, la emperatriz adoptó un decreto que permitía a los lamas budistas predicar sus enseñanzas en el territorio del Imperio ruso. Todos los lamas que deseaban venir a Rusia juraban lealtad al imperio. El decreto también los eximía del pago de impuestos. Al mismo tiempo, el 2 de diciembre de 1742, se adoptó un decreto sobre la expulsión de todos los ciudadanos de fe judía, con permiso de permanencia solo para aquellos que quisieran convertirse a la ortodoxia.

En 1744-1747 se realizó el 2º censo de población contribuyente.

A finales de la década de 1740 y la primera mitad de la de 1750, por iniciativa de Pyotr Shuvalov, se llevaron a cabo una serie de transformaciones importantes. En 1754, el Senado adoptó una resolución desarrollada por Shuvalov sobre la abolición de los derechos de aduana internos y las pequeñas tasas. Esto condujo a una importante reactivación de las relaciones comerciales entre las regiones. Se fundaron los primeros bancos rusos: Dvoryansky (Préstamo), Merchant y Medny (Estado).

Se llevó a cabo una reforma fiscal que permitió mejorar la situación financiera del país: las tarifas por realizar transacciones de comercio exterior se aumentaron a 13 kopeks por 1 rublo (en lugar de los 5 kopeks que se cobraban anteriormente). Se aumentó el impuesto a la sal y al vino.

En 1754 se creó una nueva comisión para redactar el Código, que completó su trabajo al final del reinado de Isabel, pero el proceso de transformación fue interrumpido por la Guerra de los Siete Años (1756-1762).

En política social continuó la línea de ampliar los derechos de la nobleza. En 1746, a los nobles se les concedió el derecho a poseer tierras y campesinos. En 1760, los terratenientes recibieron el derecho de exiliar a los campesinos a Siberia y contarlos en lugar de reclutas. A los campesinos se les prohibió realizar transacciones monetarias sin el permiso del terrateniente.

En 1755, los campesinos industriales fueron asignados como trabajadores permanentes (de posesión) en las fábricas de los Urales.

Se abolió la pena de muerte (1756) y se puso fin a la práctica generalizada de la tortura sofisticada.

Bajo Isabel, se reorganizaron las instituciones educativas militares. En 1744 se emitió un decreto para ampliar la red de escuelas primarias. Se abrieron los primeros gimnasios: en Moscú (1755) y Kazán (1758). En 1755, por iniciativa de I. I. Shuvalov, se fundó la Universidad de Moscú y, en 1760, la Academia de las Artes. 30 de agosto de 1756: se firmó un decreto sobre el inicio de la creación de la estructura de los Teatros Imperiales de Rusia. Se han creado destacados monumentos culturales (Palacio de Catalina Tsarskoye Selo, etc.). Se brindó apoyo a M.V. Lomonosov y otros representantes de la ciencia y la cultura rusas. En el último período de su reinado, Isabel estuvo menos involucrada en cuestiones de administración pública, confiándola a P.I. y I.I. Shuvalov, M.I. y R.I. Vorontsov y otros.

En general, la política interna de Isabel Petrovna se caracterizó por la estabilidad y un enfoque en aumentar la autoridad y el poder del poder estatal. Basándose en una serie de indicios, se puede decir que el rumbo de Elizaveta Petrovna fue el primer paso hacia la política del absolutismo ilustrado, que luego se llevó a cabo bajo Catalina II.

La emperatriz Isabel fue la última gobernante de Rusia que era Romanov "de sangre".

Malestar social

A principios de los años 50-60. Siglo XVIII Hubo más de 60 levantamientos de campesinos monásticos.

En los años 30-40. En Bashkiria hubo dos levantamientos.

En 1754-1764 Se observaron disturbios en 54 fábricas de los Urales (200 mil campesinos registrados).

La política exterior

Guerra Ruso-Sueca (1741-1743)

En 1740, el rey de Prusia Federico II decidió aprovechar la muerte del emperador austríaco Carlos VI para capturar Silesia. Comenzó la Guerra de Sucesión de Austria. Prusia y Francia, hostiles a Austria, intentaron persuadir a Rusia para que participara en el conflicto de su lado, pero también se conformaron con la no intervención en la guerra. Por lo tanto, la diplomacia francesa intentó empujar a Suecia y Rusia a un conflicto para desviar la atención de esta última de los asuntos europeos. Suecia declaró la guerra a Rusia.

Las tropas rusas bajo el mando del general Lassi derrotaron a los suecos en Finlandia y ocuparon su territorio. El Tratado de Paz de Abo (Tratado de Paz de Abo) de 1743 puso fin a la guerra. El tratado fue firmado el 7 de agosto de 1743 en la ciudad de Abo (ahora Turku, Finlandia) del lado ruso por A. I. Rumyantsev e I. Lyuberas, del lado sueco, G. Cederkreis y E. M. Nolken. Durante las negociaciones, Rusia acordó limitar sus reclamaciones territoriales sujetas a la elección del príncipe Holstein Adolf Fredrik, primo del heredero ruso Pedro III Fedorovich, como heredero al trono sueco. El 23 de junio de 1743, Adolf fue elegido heredero al trono sueco, lo que abrió el camino para un acuerdo final.

El artículo 21 del tratado de paz estableció la paz eterna entre los países y los obligó a no celebrar alianzas hostiles. Se confirmó la Paz de Nystad de 1721. La provincia de Kymenegor con las ciudades de Friedrichsgam y Vilmanstrand, parte de la provincia de Savolaki con la ciudad de Neyshlot, pasó a Rusia. La frontera corre a lo largo del río. Kymmene.

Inicio de la adhesión de Kazajstán a Rusia

En 1731, Anna Ioannovna firmó un documento aceptando al joven kazajo Zhuz en Rusia. Khan de zhuz Abulkhair y los ancianos juraron lealtad a Rusia.

En 1740-1743 El Zhuz Medio pasó voluntariamente a formar parte de Rusia; Se construyeron Orenburg (1743) y una fortaleza en el río. Yaik.

Guerra de los Siete Años (1756-1763)

En 1756-1763, la guerra anglo-francesa por las colonias. En la guerra participaron dos coaliciones: Prusia, Inglaterra y Portugal contra Francia, España, Austria, Suecia y Sajonia con la participación de Rusia.

En 1756, Federico II atacó Sajonia sin declarar la guerra. En el verano del mismo año la obligó a capitular. El 1 de septiembre de 1756 Rusia declaró la guerra a Prusia. En 1757, Federico derrotó a las tropas austriacas y francesas y envió las fuerzas principales contra Rusia. En el verano de 1757, el ejército ruso bajo el mando de Apraksin entró en Prusia Oriental. El 19 de agosto, el ejército ruso fue rodeado cerca del pueblo. Gross-Jägersdorf y sólo con el apoyo de la brigada de reserva de P. A. Rumyantsev escaparon del cerco. El enemigo perdió 8 mil personas. y se retiró. Apraksin no organizó la persecución y él mismo se retiró a Curlandia. Elizabeth lo suspendió y lo puso bajo investigación. El inglés V.V Fermor fue nombrado nuevo comandante.

A principios de 1758, las tropas rusas capturaron Königsberg y luego toda Prusia Oriental, cuya población incluso juró lealtad a la emperatriz. Prusia Oriental recibió el estatus de provincia de Rusia. En agosto de 1758 tuvo lugar una batalla cerca del pueblo de Zondorf, en la que ganaron los rusos. Algunos gobernantes de Alemania a menudo brindaban por los alemanes que salieron victoriosos en Zondorf, pero estas declaraciones eran erróneas, ya que el ejército que ocupó el campo de batalla después de la batalla fue considerado victorioso. El ejército ruso ocupó el campo de batalla (esta batalla la describe Valentin Pikul en detalle en la novela "Con una pluma y una espada"). Al comienzo de la batalla, Fermor, junto con el embajador de Austria ante el ejército ruso, huyeron del campo de batalla. El ejército ganó sin comandante en jefe. Posteriormente, Fermor fue suspendido. Durante la batalla, Federico II pronunció las famosas frases:

El ejército estaba dirigido por P. S. Saltykov. El 1 de agosto de 1759, un ejército ruso de 58.000 hombres libró una batalla general cerca del pueblo de Kunersdorf contra un ejército prusiano de 48.000 hombres. El ejército de Federico II fue destruido: sólo quedaron 3 mil soldados. La caballería de Seydlitz también fue destruida. Saltykov fue destituido por su actitud desafiante hacia las tropas austriacas y el retraso en el avance y fue nombrado A.B.

El 28 de septiembre de 1760 Berlín fue capturada; Fue capturado brevemente por el cuerpo del general Z. G. Chernyshev, quien capturó almacenes militares. Sin embargo, cuando Federico se acercó, el cuerpo se retiró.

En diciembre de 1761, Isabel murió a causa de una hemorragia en la garganta debido a una enfermedad crónica desconocida para la medicina de la época.

Pedro III ascendió al trono. El nuevo emperador devolvió todas las tierras conquistadas a Federico e incluso ofreció asistencia militar. Sólo un nuevo golpe palaciego y el ascenso al trono de Catalina II impidieron las acciones militares rusas contra antiguos aliados: Austria y Suecia.

Vida personal

Según algunos contemporáneos, Isabel estaba en matrimonio secreto con Alexei Razumovsky. Lo más probable es que no tuviera hijos, por lo que tomó bajo su tutela personal a dos hijos y a la hija del cadete de cámara Grigory Butakov, que quedaron huérfanos en 1743: Peter, Alexei y Praskovya. Sin embargo, después de la muerte de Elizaveta Petrovna, aparecieron muchos impostores que se hacían llamar sus hijos de su matrimonio con Razumovsky. Entre ellos, la figura más famosa fue la llamada Princesa Tarakanova.

El período del reinado de Isabel fue un período de lujo y exceso. En la corte se celebraban regularmente bailes de máscaras y, en los primeros diez años, se celebraban las llamadas "metamorfosis", en las que las damas se vestían con trajes de hombre y los hombres con trajes de mujer. La propia Elizaveta Petrovna marcó la pauta y marcó tendencias. El guardarropa de la Emperatriz constaba de hasta 15 mil vestidos.

Sucesión al trono

El 7 de noviembre (18 de noviembre) de 1742, Isabel nombró a su sobrino (el hijo de su hermana Anna), duque de Holstein Karl-Peter Ulrich (Peter Fedorovich), heredero oficial al trono. Su título oficial incluía las palabras "Nieto de Pedro el Grande".

En el invierno de 1747, la emperatriz emitió un decreto, conocido en la historia como “regulación del cabello”, ordenando a todas las damas de la corte que se cortaran el cabello y les dio a todas “pelucas negras despeinadas” para que las usaran hasta que volvieran a crecer. A las mujeres de la ciudad se les permitió por decreto conservar el cabello, pero usar las mismas pelucas negras en la parte superior. El motivo del pedido fue que la emperatriz no podía quitarse el polvo del cabello y decidió teñirlo de negro. Sin embargo, esto no ayudó y tuvo que cortarse el cabello por completo y usar una peluca negra.

Memoria

Literatura

• Klyuchevsky, Vasily Osipovich Curso de historia rusa (Conferencias I-XXXII, rtf)

• V. Pikul "Palabra y obra"
• Álbum de coronación de Isabel Petrovna.
• Soboleva I. A. Princesas alemanas: destinos rusos. - San Petersburgo: Peter, 2008. - 413 p.

Al cine

• "Joven Catalina" (" joven catalina"), (1991). Vanessa Redgrave interpreta a Elizabeth.
• “Vivat, guardiamarinas!” (1991), “Guardiamarinas - III” (1992). En el papel de Elizabeth - Natalya Gundareva.
• “Secretos de golpes de palacio” (películas 1-5, (2000-2003)). En el papel de Elizabeth - Ekaterina Nikitina.
• Con una pluma y una espada (2008). En el papel de Elizabeth - Olga Samoshina.

• En el invierno de 1747, la emperatriz emitió un decreto, conocido en la historia como “regulación del cabello”, ordenando a todas las damas de la corte que se cortaran el cabello y les dio a todas “pelucas negras despeinadas” para que las usaran hasta que volvieran a crecer. A las mujeres de la ciudad se les permitió por decreto conservar el cabello, pero usar las mismas pelucas negras en la parte superior. El motivo del pedido fue que la emperatriz no podía quitarse el polvo del cabello y decidió teñirlo de negro. Sin embargo, esto no ayudó y tuvo que cortarse el cabello por completo y usar una peluca negra.

• Elizaveta Petrovna tenía una nariz chata, y esta nariz (bajo pena de castigo) fue pintada por los artistas solo de toda la cara, desde su mejor lado. Y casi no hay retratos de perfil de Isabel, salvo algún que otro medallón sobre un hueso de Rastrelli.

• El 22 de diciembre de 2009 se inauguró en el Palacio de Catalina la exposición “Vivat, Elizabeth”, organizada por el Museo-Reserva Estatal “Tsarskoe Selo” junto con el Museo Estatal de Cerámica y la “Finca Kuskovo del siglo XVIII” y dedicada a el 300 aniversario de la emperatriz Isabel Petrovna. Una de las piezas más interesantes de la exposición fue una escultura de papel que representa el atuendo ceremonial de la emperatriz Isabel Petrovna. La escultura fue realizada especialmente para la exposición, por encargo del museo, por la mundialmente famosa artista belga Isabelle de Borchgrave.

El 18 de diciembre de 1709, según el estilo antiguo, nació la amada hija de Pedro I, Isabel. Cómo la “hija de Petrov” llegó a la corona, qué la amenazaba y por qué la princesa rusa más bella se casó sólo a los 33 años.

chica bastarda

Elizaveta Petrovna nació en el palacio real de Kolómenskoye el 18 de diciembre de 1709. Su padre, Pedro I, en ese momento se dirigía hacia Moscú con un ejército después de la exitosa campaña de Poltava. Al recibir la noticia del nacimiento de su hija, dejó todo a un lado y exigió una fiesta de tres días.

La futura emperatriz pasó su infancia y juventud en Moscú y San Petersburgo, donde se crió con su hermana mayor Anna, que nació un año antes. Prácticamente no veían a sus padres: su padre siempre estaba de viaje, donde lo acompañaba su madre. Y cuando estaban en San Petersburgo, la madre estaba más ocupada preparando recepciones o intrigas palaciegas que con sus propias hijas.

Las hijas reales fueron cuidadas por la hermana menor de Pedro, la zarina Natalya Alekseevna, o por los Ménshikov y sus familiares. Así, las niñas mencionaban a menudo a la jorobada Varvara, la hermana de Daria Ménshikova, en las cartas a su padre. Los Ménshikov informaron al zar en sus cartas sobre el estado de sus hijas.

Las niñas se convirtieron en hijas legales recién en 1712, cuando Pedro I se casó con su madre Catalina. Antes de esto eran considerados bastardos. Los contemporáneos describieron cómo las niñas se aferraban al dobladillo de su madre durante la boda: se les permitía hacerlo cuando se negaban a dejar a sus padres a pesar de todas las persuasiones. No estuvieron presentes en la fiesta por mucho tiempo: Anya, de tres años, y Lisa, de dos, fueron llevadas a la cama. Aunque Lisa se convirtió en hija legítima cuando aún era muy joven, más tarde los opositores a su ascenso al trono mencionaron repetidamente este hecho en la biografía de la niña.

A Isabel le empezaron a enseñar a leer y escribir a la edad de dos o tres años. Peter y Catherine personalmente les escribieron notas, a las que, sin embargo, comenzaron a responder mucho más tarde. La primera carta de la que se desprende que se mantuvo correspondencia está fechada en 1718.

Lizetka, amiga mía, ¡hola! Gracias por tus cartas, que Dios te conceda la alegría de verte. Gran hombre, besa a tu hermano de mi parte”, escribió Pedro I. “Gran hombre” es el hijo del zar, a quien se predijo que correría el destino del emperador, pero murió en 1719 a la edad de cuatro años.

No puedo soportar casarme

Isabel fue declarada apta para contraer matrimonio a la edad de 12 años, en 1722. En ese momento, la niña, como escribieron las personas cercanas al primer emperador ruso, se había vuelto más bonita y femenina. Sin embargo, no perdió su belleza hasta la vejez.

La niña sabía montar a caballo, bailaba maravillosamente y también hablaba tranquilamente francés, alemán, finlandés y sueco.

Incluso se celebró una ceremonia especial para marcar el comienzo de su “edad matrimonial”: Peter cortó “alas de ángel” especiales del vestido de su hija. Peter soñaba con convertir a su hija en reina de Francia. Quería casarla con el futuro Luis XV, que era varios meses menor que Isabel. Sin embargo, el tribunal francés se mostró escéptico ante una hija nacida fuera del matrimonio. Incluso el hecho de que fuera reconocido oficialmente no ayudó. Peter hizo varios intentos de llegar a un acuerdo a través de sus asociados. Pero nada funcionó.

En ese momento, el duque de Holstein Karl-Friedrich buscaba la mano de Isabel. Sin embargo, también estuvo de acuerdo con Anna, pero ¿qué diferencia hay entre las hijas? En los matrimonios reales no se trata de amor, sino de política. Holstein necesitaba que Rusia le devolviera su provincia de Schleswig, que Dinamarca había recuperado en 1704. Peter demoró en responder, ya que no consideraba beneficiosa tal alianza, especialmente cuando estaba en juego Francia. Como resultado, poco antes de su muerte, en 1725, tomó una decisión y entregó a Anna en matrimonio al duque.

También existía la opción del matrimonio dentro del apellido. Así, el vicecanciller Andrei Ivanovich Osterman aseguró que la niña debería casarse con Pyotr Alekseevich (el hijo de Pedro I de su primer matrimonio). Pero el emperador ruso rechazó categóricamente esta opción: aunque solo fuera por el padre, Liza y Petya eran parientes entre sí. La iglesia no aprobaría tal matrimonio, pero eso no es lo principal. En la sociedad, Lisa se ha ganado la reputación de bastarda; si a esto le sumamos un matrimonio intradinástico, no se pueden evitar disturbios y revoluciones. Por tanto, se abandonó la idea del futuro emperador Pedro II.

Tras la muerte de su padre, continuó la búsqueda de un novio para su hija. Entonces, en mayo de 1727, poco antes de su muerte, Catalina I legó a su hija para que se casara con Karl-August, el hermano menor del marido de Anna Petrovna. Visitó la corte rusa y la niña quedó encantada. Pero en verano enfermó repentinamente y murió.

Entretenimiento

Después de la muerte de mi madre y el fracaso de mi próximo novio, la cuestión del matrimonio de Elizabeth se calmó. Ocupó un lugar destacado en la corte de su sobrino, el emperador Pedro II. En la corte se habló de su relación íntima con el gobernante de 13 años, a quien ella misma era cinco años mayor. Sin embargo, estos no son más que rumores.

Los rusos temen el gran poder que la princesa Isabel tiene sobre el zar: su inteligencia, belleza y ambición asustan a todos, escribió el enviado español, duque de Liria.

Cazar, montar a caballo, salir de fiesta: la "bella hermana" no se negó a sí misma los placeres. Muchas personas figuraban como sus amantes en ese momento. Al enterarse de su romance con el chambelán Alexander Buturlin, Peter incluso exigió que lo expulsaran de Rusia. Como resultado, fue enviado al ejército que entonces estaba estacionado en Ucrania.

al monasterio

Isabel vivió sin preocupaciones hasta principios de 1730. Salió a cazar, bailó y atrajo las miradas de admiración de los fans. Sin embargo, el emperador de 14 años, que no le negó nada a su amada tía, de repente enfermó de viruela y murió.

Para Lisa comenzaron tiempos completamente diferentes. Su prima Anna Ioannovna fue convocada desde Curlandia. Se llevó a su amante con ella: Biron. Y no importa cuánto intentó Isabel mostrar su lealtad, la emperatriz desconfiaba mucho de ella. Después de todo, Isabel era la legítima candidata al trono. Pero Anna Ioannovna tenía sus propios planes para la corona rusa: ponérsela sobre la cabeza a sus familiares.

Anna Ioannovna limitó el subsidio de Isabel a 30.000 rublos al año para todo. Traducido al dinero moderno, esto equivale a unos 15 millones de rublos. La cantidad es fabulosa para la mayoría, pero no para la hija real, que, en principio, no estaba acostumbrada a negarse nada. Especialmente en vestidos y joyas, el costo de cada uno de los cuales se estimó en cientos de rublos.

Sin embargo, la emperatriz resolvió el problema del dinero fácilmente: pidió un préstamo. Bueno, ¿quién puede negarse? Todas estas deudas fueron posteriormente cubiertas por Biron, quien ascendió al trono, e Isabel le agradeció más tarde, salvándole la vida. Además, convirtiéndose en emperatriz, devolvió a Biron y su familia del exilio en la ciudad de Pelym (ahora territorio de los Urales), donde Anna Leopoldovna lo había enviado en 1741. Una vez saldadas sus deudas, se instaló en Yaroslavl.

Aunque Isabel se presentaba más como una juerguista, para quien cualquier política era profundamente ajena, todavía representaba un peligro, al menos por derecho de nacimiento. Anna Ioannovna sólo vio una buena opción rusa: un monasterio. Por supuesto, la idea de casar a la niña y expulsarla de la corte rusa persistió, pero en realidad la idea era dudosa. Después de todo, era necesario elegir un novio de un país, cuanto más lejos de Rusia, mejor. Y lo más importante es que no dispone de un gran ejército capaz de apoyar al legítimo heredero al trono.

amigos granaderos

"monasterio" y "asesinato" flotaban sobre la cabeza de Isabel como una dura sentencia.

Entonces la hija de Petrov decidió que había llegado el momento de salvarse. Los preparativos para el golpe duraron casi un año. El primer paso fue ganarnos a los militares. Sin embargo, era bastante factible. En ese momento, todos los problemas que existían en el ejército bajo Pedro I ya se habían olvidado del emperador, lo que significa que a su hija inicialmente se le garantizó una "posición inicial exitosa".

Además, la agradable y sonriente Isabel no dejó indiferente a nadie, siendo capaz, como escribieron sus contemporáneos, de conquistar a la gente con solo una sonrisa. Bautizó a los niños de los granaderos, podía beber fácilmente con los soldados y les dio dinero. La chica tampoco se negó a coquetear.

El resultado de tal cálculo femenino fue observado por el mariscal de campo ruso, general Burchard Minich, quien vino a Alexandrovskaya Sloboda, donde entonces vivía Isabel, para felicitarla por el próximo Año Nuevo.

Se alarmó mucho cuando vio que la entrada, la escalera y el pasillo estaban llenos de soldados de la guardia, que familiarmente llamaban a la princesa su padrino, según lo citó más tarde el diplomático francés Jacques-Joachim Trotti Shetardy.

Por eso, cuando pronto el padrino anunció que estaba en problemas, los granaderos la defendieron. ¡Todavía lo haría! ¡Los "busurmanes" que llegan ocupan el trono ruso y la hija de Petrova puede ser asesinada!

Golpe

Como resultado, cuando Isabel pidió ayuda, unos 300 granaderos se casaron con ella. La mitad de ellos estaban alistados en la guardia en los años 1737-1741, es decir, probablemente aún no tenían 30 años. Es curioso que entre los partidarios de Isabel no hubiera ni un solo representante de las entonces nobles familias nobles.

El rival fue superado en número varias veces: así, según los documentos, unas 10 mil personas servían en la corte imperial rusa. Podrían enfrentarse fácilmente a trescientos rebeldes. Por tanto, se decidió dar el golpe por la noche.

El 25 de noviembre de 1741, Isabel llegó al cuartel de los guardias del Regimiento Preobrazhensky alrededor de las 23:00 horas con las siguientes palabras: "¿Sabes de quién soy hija?" Después de una respuesta afirmativa, preguntó si los soldados estaban dispuestos a morir por ella. Bueno, por supuesto que estamos listos. Luego todos se dirigieron hacia el Palacio de Invierno.

Existe la leyenda de que cien metros antes de la puerta, Isabel se bajó del trineo y corrió delante de los guardias, pero tropezó. Y la llevaron en brazos al Palacio de Invierno.

El marido de la regente, Anna Leopoldovna, el generalísimo Anton Ulrich, fue sacado del palacio envuelto en una sábana por los militares y empujado a un carruaje. Fue más bien un momento político: ¿cómo puedes dar órdenes si toda la guardia se ríe de tu apariencia?

Siguiéndolo, sacaron a Anna y en una hora recogieron todas las pertenencias posibles. La fila estaba detrás del pequeño emperador. Isabel prohibió estrictamente despertar al niño, por lo que los granaderos esperaron varias horas hasta que despertara.

Pobre niña, eres inocente, pero tus padres son culpables”, supuestamente dijo Isabel, tomando a la pequeña regla en sus brazos y prometiendo dejar a la familia con vida.

El golpe para toda la corte y para todo el país se justificó de la siguiente manera: debido a los disturbios externos e internos, el Salvavidas pidió a la hija de Petrova que aceptara el trono. Isabel destruyó apresuradamente todo lo relacionado con el pequeño emperador: se quemaron los documentos firmados en su nombre, se envió dinero para fundirlo y las hojas de firmas juradas se destruyeron por completo en público.

El reinado de Isabel, de 1741 a 1761, fue recordado por los contemporáneos principalmente como una época de bailes, recepciones y entretenimiento, así como la juerga de la nobleza, a la que se le concedieron muchos privilegios. Pero no debemos perder de vista las importantes reformas que llevó a cabo.

Así, en uno de los primeros decretos de la emperatriz abolió la pena de muerte. Existe la leyenda de que Isabel juró hacer esto si ascendía al trono.

Realizaron el segundo censo de población de la historia y abolieron una serie de derechos internos y pequeñas tarifas a los comerciantes. Al mismo tiempo, se incrementó el impuesto al comercio exterior. Se abrieron los bancos Merchant y Noble, lo que se considera un poderoso impulso para el desarrollo del espíritu empresarial.

) -Emperatriz rusa desde el 25 de noviembre de 1741 de la dinastía Romanov, hija de Pedro I y Catalina I

Prenner Georg Gaspar Joseph von. Retrato de la emperatriz Isabel Petrovna. 1754

La hija de Pedro I y la futura emperatriz Catalina Alekseevna nació el 18 de diciembre de 1709.Ese día, las tropas rusas, vencedoras de la batalla de Poltava, desplegaron sus estandartes y entraron solemnemente en Moscú.

La entrada triunfal de las tropas rusas en Moscú tras la victoria de Poltava. Grabado de A.F. Zubov. 1710

Al recibir la feliz noticia del nacimiento de su hija, Peter organizó una celebración de tres días en su honor. El rey amaba mucho a su segunda familia. Hombre poderoso y severo, su afecto por sus seres queridos a veces adoptaba formas conmovedoras.

Retrato de la princesa Elizaveta Petrovna (1709-1761) cuando era niña. Museo Ruso, Castillo Mikhailovsky.

En cartas a su esposa, saludaba a "cuatro cariño", este era el apodo familiar de Elizabeth en el momento en que todavía gateaba a cuatro patas. En el verano de 1710, Pedro navegó por el Báltico en el velero "Lizetka", así llamaba a la pequeña princesa heredera.

Retrato de la princesa Anna Petrovnay Elizaveta Petrovna, 1717, Luis Caravaque

A la edad de dos años, asistió a la boda de sus padres con su hermana Anna, de cuatro años. Peter comenzó temprano a escribir por separado a las princesas, animándolas de manera similar a dominar la alfabetización. Isabel aprendió a leer y escribir cuando no tenía ni ocho años. Pedro I vio a sus hijas como instrumentos de juego diplomático y las preparó para matrimonios dinásticos con el fin de fortalecer la posición internacional de Rusia.

I.N. Nikitin Retrato de Isabel Petrovna cuando era niña (1709-1761) 1712-13

Por eso, en primer lugar, prestó atención al aprendizaje de lenguas extranjeras. Elizabeth sabía perfectamente el francés y hablaba alemán e italiano. Además, a las princesas se les enseñó música, baile, vestimenta y etiqueta. Desde pequeña, a Isabel le encantaba bailar y no tenía igual en este arte.

Tsesarevna Elizaveta Petrovna, futura emperatriz (1741-1761).Retrato inacabado. Década de 1720. Museo Ruso

En 1720, su padre intentó concertar el matrimonio de Isabel con el rey francés Luis XV, de su edad. Pero Versalles reaccionó con moderación a la propuesta de la parte rusa debido a los orígenes de la princesa: su madre era una plebeya y no estaba casada con el zar en el momento del nacimiento de su hija. Más tarde, Isabel se casó con Carlos Augusto de Holstein, pero él murió antes de convertirse en su marido.

La posición de la joven Isabel en la corte y en el estado cambió drásticamente en 1727. Antes, la vida era como un cuento de hadas. Estaba rodeada de una sociedad joven, donde reinaba no sólo por el derecho de su alta cuna, sino también gracias a sus méritos personales. Rápida para proponer ideas y agradable de tratar, Isabel era el alma de esta sociedad.

Artista desconocido. Retrato de la emperatriz Isabel Petrovna

Elizaveta Petrovna (retrato ecuestre de la emperatriz con su séquito)

Recibió suficiente dinero de sus padres para satisfacer su pasión por todo tipo de entretenimiento. Todo a su alrededor hervía de diversión, ella siempre estaba ocupada: viajes por el Neva y fuera de la ciudad, disfraces y bailes, puestas en escena de obras de teatro, música, baile... Este éxtasis de vida continuo e imprudente terminó cuando la madre de Isabel, la emperatriz Catalina Morí.

Pedro II de Rusia y Isabel Petrovna

En la corte de Anna Ioannovna, la princesa heredera recibió los honores que le correspondían. Sin embargo, Isabel se sentía como una extraña en la familia real. Su relación con su prima, la emperatriz, no fue muy cálida. Anna Ioannovna asignó a Isabel una asignación más que modesta, y la princesa, que antes no sabía contar el dinero, ahora lo necesitaba constantemente. Se cree que la Emperatriz no podía olvidar su humillante posición en Mitau, cuando, debido a la eterna falta de fondos, muy a menudo acudía a los padres de Isabel pidiendo ayuda y no siempre recibía lo que pedía. Y por eso a la princesa le costó mucho vivir con ella.

Artista desconocido.Retrato de la zarevna Elizaveta Petrovna, década de 1730

Y, finalmente, Anna Ioannovna estaba preocupada por los derechos de Isabel a la corona rusa. La emperatriz veía a su pariente como un rival serio y temía seriamente un golpe de estado a su favor. Anna ordenó que la princesa heredera fuera puesta bajo vigilancia.

Louis Caravaque Retrato de la emperatriz Anna Ioannovna. 1730

Para deshacerse de Isabel, querían casarla en algún lugar lejos de San Petersburgo y con un príncipe "seguro", o obligarla a convertirse en monja. Nunca se encontró un novio adecuado. Y la amenaza de cadena perpetua en un monasterio para Isabel se convirtió en una pesadilla, de la que se deshizo sólo después de ascender al trono. La princesa se vio obligada a comportarse con mucho cuidado. Cualquier palabra dicha sin pensar, por ella o por alguien cercano a ella, podría conducir al desastre. Claramente no estaba interesada en la política.

Iván VIAntónovich(1740-1764), emperador en 1740-1741. Bisnieto de Ivan V Alekseevich, hijo del príncipe Anton Ulrich de Brunswick y la princesa de Mecklenburg Anna Leopoldovna, sobrina de la emperatriz rusa Anna Ioannovna. Según el manifiesto de Anna Ioannovna, fue nombrado heredero al trono.

Y, sin embargo, los temores de Anna Ioannovna no carecían de fundamento, aunque sólo fuera porque la hija de Pedro I era amada en la guardia. Visitaba a menudo los cuarteles de los regimientos Preobrazhensky y Semenovsky. Los oficiales y soldados de la guardia familiar a menudo le pedían a Isabel que fuera la madrina de sus hijos, y ella cumplía de buena gana sus deseos. Fue entre los guardias donde Isabel encontró a sus fervientes partidarios, con la ayuda de quienes tomó el poder en el estado en noviembre de 1741.

Fyodor Moskovitin Juramento del regimiento Preobrazhensky a la emperatriz Isabel Petrovna.

Desde los primeros días del reinado de Isabel bajo la emperatriz.Se formó un círculo de seguidores de larga data que ocupaban los puestos gubernamentales y judiciales más importantes. El amor apasionado por las canciones populares se convirtió en el motivo de la atención de Isabel hacia Alexei Grigorievich Razumovsky. Cosaco ucraniano, un hombre raro y apuesto, llegó a San Petersburgo gracias a su magnífico bajo. Fue aceptado como cantante de la corte en 1731. Habiendo ascendido al trono, Elizaveta Petrovna concedió al desarraigado Razumovsky el título de conde y el rango de mariscal de campo, y en 1742, como afirman muchos historiadores, se casó en secreto con él. Los rumores sobre este matrimonio dieron lugar inevitablemente a leyendas sobre los hijos supuestamente existentes de Isabel y Razumovsky, por ejemplo, la princesa Tarakanova e incluso sobre toda la familia Tarakanoff.

Artista desconocido Retrato de Alexei Grigorievich Razumovsky, mediados del siglo XVIII

Elizabeth Petrovna

Uno de los asistentes más cercanos de la emperatriz fue Mikhail Illarionovich Vorontsov. Vicecanciller desde 1744, sucedió a A.P. Bestuzhev como Canciller del Imperio en 1758.

Antropov Alexey Petrovich: Retrato del príncipe M.I Vorontsov

La emperatriz trajo del exilio y acercó a ella a los príncipes supervivientes Dolgorukov, el conde P. I. Musin-Pushkin y varios otros nobles rusos que sufrieron durante el reinado de Anna Ioannovna. Isabel destituyó a los extranjeros de todos los puestos clave del estado; no tenía intención de expulsar del país a los especialistas extranjeros que Rusia necesitaba con urgencia.

Coronación de Isabel Petrovna

Procesión de coronación de Isabel

El desarrollo del programa de política exterior y la diplomacia rusa de la época isabelina se asocian principalmente con el nombre del estadista perspicaz y experimentado, el canciller Alexei Petrovich Bestuzhev.

Bestúzhev-Ryumin, Alexey Petrovich

Por iniciativa suya, en la primavera de 1756, para considerar cuestiones de política exterior y operaciones militares directas durante la Guerra paneuropea de los Siete Años de 1756-1763. Se estableció un nuevo órgano de gobierno: la Conferencia del Tribunal Supremo (una reunión permanente de altos dignatarios y generales compuesta por diez personas). Bestuzhev encontró problemas en las relaciones ruso-suecas a finales de 1741, cuando fue nombrado vicecanciller. Suecia, recuperándose de su derrota en la Guerra del Norte, esperaba vengarse y en los campos de batalla reconsiderar los términos de la Paz de Nystadt, según la cual Rusia se había apoderado de las posesiones suecas en los estados bálticos. En el verano de 1741 comenzó la guerra ruso-sueca, que terminó con la derrota total del ejército sueco. En agosto de 1743 se firmó un tratado de paz en Abo (Finlandia): el gobierno sueco confirmó los términos de la Paz de Nystadt firmada por Pedro I.

Captura de la fortaleza de Kolberg durante la Guerra de los Siete Años.Alexander Evstafievich Kotzebue

La Guerra de los Siete Años, en la que Rusia, con fines de adquisiciones territoriales,se puso del lado de Francia y Austria contra Prusia y Gran Bretaña; tras la dimisión de Bestuzhev, se llevó a cabo bajo el mando de M.I. A principios de 1758, las tropas rusas entraron en Prusia Oriental y ocuparon Königsberg. En agosto del año siguiente, el ejército prusiano fue derrotado en la batalla de Kunersdorf, y en septiembre de 1760, las tropas rusas entraron en Berlín, de donde luego se vieron obligadas a abandonar debido a la inconsistencia en las acciones de los aliados. Las victorias del ejército ruso fueron decisivas para la derrota de Prusia, cuyas fuerzas armadas eran entonces consideradas las mejores de Europa.

Batalla de Kunnensdorf,Alexander Evstafievich Kotzebue

Luis CARAVACQUE. Retrato de la emperatriz Isabel Petrovna

Al ascender al trono, Isabel se proclamó continuadora de la obray su gran padre. El cumplimiento de los "principios" de Pedro determinó, en particular, el interés de la emperatriz por las cuestiones económicas, el desarrollo de la industria y el comercio. Alentando el espíritu empresarial noble, Isabel ordenó el establecimiento del Noble Loan Bank en 1753, que otorgaba préstamos a los terratenientes garantizados por tierras. En 1754 se fundó el Merchant Bank. Se crearon nuevas fábricas (empresas industriales) a un ritmo rápido. En Yaroslavl y Serpukhov, Irkutsk y Astrakhan, Tambov e Ivanovo, en propiedades nobles, las fábricas producían telas y seda, lienzos y cuerdas. La destilación se generalizó entre los terratenientes.

Artista desconocido del siglo XVIII. Salida de la emperatriz Isabel Petrovna. // Museo de la finca Kuskovo

La decisión del gobierno de Isabel, tomada en 1753, de abolir los derechos de aduana internos, que se habían aplicado a las ciudades y carreteras rusas desde la antigüedad, tuvo consecuencias importantes. Gracias a esta reforma fue posible poner fin a la fragmentación económica de Rusia. Este fue un paso audaz en ese momento. En Francia, por ejemplo, las costumbres internas dejaron de existir sólo durante la revolución de finales del siglo XVIII, y en Alemania, en los años 30. siglo XIX

Artista ruso desconocido de la segunda mitad del siglo XVIII. Retrato de la zarevna Elizaveta Petrovna

Isabel amplió significativamente los derechos y libertades de los nobles. En particular, abolió la ley de Pedro I sobre menores, según la cual los nobles debían comenzar el servicio militar desde una edad temprana como soldados. Bajo Isabel, los niños estaban inscritos en los regimientos correspondientes desde su nacimiento. Así, a los diez años, estos jóvenes, sin conocer el servicio, se convirtieron en sargentos, y ya con 16 o 17 años eran capitanes de regimiento. Durante el reinado de Isabel Petrovna, se desarrollaron condiciones favorables para el desarrollo de la cultura rusa, especialmente la ciencia y la educación.

Taras Shevchenko Emperatriz Elizaveta Petrovna y Suvorov (grabado). Década de 1850

La Academia de Ciencias participó en la organización de expediciones geográficas al Lejano Oriente con el objetivo de estudiar detalladamente las fronteras nororientales del Imperio Ruso. A mediados del siglo XVIII. apareció una obra en cuatro volúmenes del naturalista I. G. Gmelin "Flora de Siberia" con una descripción de 1.200 plantas y la primera obra etnográfica en Rusia "Descripción de la tierra de Kamchatka", escrita por S. P. Krasheninnikov

El decreto de 1744 "Sobre la unificación de las escuelas de las provincias en un solo lugar y la educación en ellas de todas las clases sociales..." facilitó el acceso a las escuelas a los niños de sectores desfavorecidos de la población. En los años 40-50. Al primer gimnasio en San Petersburgo, que existió desde 1726, se agregaron dos más: en la Universidad de Moscú (1755) y en Kazán (1758). En 1752, la Escuela de Navegación, fundada por Pedro I, se reorganizó en el Cuerpo de Cadetes de la Gentry Naval, donde se entrenaba a los oficiales de la Armada rusa. 25 de enero de 1755

Universidad de Moscú

Isabel firmó un decreto por el que se crea la Universidad de Moscú. La difusión de la educación universitaria en Rusia fue el sueño más preciado del científico y educador ruso M. V. Lomonosov. Habiendo ganado a su lado al vicecanciller M.I. Vorontsov y al aún más influyente favorito I.I. Shuvalov, Lomonosov elaboró ​​un proyecto para abrir una universidad en Moscú. Junto con este evento está la creación en 1756 del teatro profesional ruso por parte de Fyodor Volkov y Alexander Sumarokov, y en 1758, la Academia de las Artes.

Ivan Ivanovich Shuvalov en 1760, retrato a pincel Fiodor Rokotov. Museo Estatal del Hermitage (San Petersburgo)

Arquitecto A.F. Kokorinov, director y primer rector de la Academia de las Artes, 1769. Retrato de la obra. D. G. Levitsky

Mijaíl Vasilievich Lomonósov

El surgimiento del interés por las bellas artes en la sociedad rusa durante la época de Isabel Petrovna está directamente relacionado con la pasión de la emperatriz por ellas. Se podría decir que de las paredes de su palacio surgieron teatro profesional, ópera, ballet y canto coral. Incluso durante los difíciles años del reinado de Anna Ioannovna para la joven Isabel, se realizaron muchas representaciones en la "pequeña corte" de la princesa heredera. En ellos participaron sus cortesanos y cantantes. Las obras trataban "sobre el tema del día". En forma alegórica, hablaron sobre el triste destino de la princesa medio deshonrada y la situación política del país.

Heinrich Buchholz Retrato de la emperatriz Isabel Petrovna en perlas. 1768

Isabel no perdió el interés por el teatro ni siquiera siendo emperatriz. Disfrutó las actuaciones, incluso si las vio más de una vez. Especialmente popular en Rusia a mediados del siglo XVIII. hubo obras de A.P. Sumarokov. No sólo las celebraciones y días festivos, sino también las fiestas habituales de Isabel Petrovna estaban necesariamente acompañadas por la interpretación de una orquesta y el canto de los músicos de la corte. Como escribe el famoso historiador E.V. Anisimov, "en la época isabelina, la música se convirtió en una parte integral e indispensable" de la vida del palacio y de la nobleza de San Petersburgo". La orquesta imperial de músicos italianos y alemanes altamente profesionales interpretó obras de Europa occidental. También se ofrecieron conciertos de compositores, originalmente destinados a la sociedad de la corte, que luego se hicieron públicos. En estos conciertos los oyentes rusos se familiarizaron con el arpa, la mandolina y la guitarra.

Vista del Palacio Anichkov

La ópera italiana floreció en la corte. No se repararon en gastos en la organización de las actuaciones. Fueron actuaciones majestuosas con números de ballet y recitaciones que dejaron una impresión imborrable en el público. Además de músicos y actores italianos, en las actuaciones participaron también jóvenes cantantes rusos. Su interpretación de difíciles arias italianas deleitó al público. Los bailarines rusos comenzaron a aparecer cada vez con más frecuencia en producciones de ballet. Así se sentaron las bases de la ópera y el ballet nacionales rusos.

Elizaveta Petrovna (1709-1761), emperatriz rusa (desde 1741).

Cuando los padres de Isabel se casaron en 1712, ella y su hermana Ana, que nació un año antes, fueron “coronadas”, es decir, legitimadas por el zar. Sin embargo, la mancha de la ilegitimidad permaneció sobre Isabel durante toda su vida. Le impidió convertirse en la novia del delfín francés (más tarde rey Luis XV), a quien su soberano padre estaba cortejando diligentemente.

Isabel y Anna recibieron una educación secular, hablaban francés, alemán e italiano, cantaban y bailaban maravillosamente. La princesa, como su padre, era inusualmente fácil de usar, se comunicaba fácilmente con la gente del pueblo, bautizaba a los hijos de los soldados y cantaba canciones con chicas comunes y corrientes en la calle durante las vacaciones.

La felicidad de Isabel terminó tras la muerte de su madre, la emperatriz Catalina I. Pedro II, que ascendió al trono, estaba loco por su bella tía e incluso soñaba con casarse con ella, en violación de todas las leyes. Sin embargo, la nobleza de Moscú rápidamente alejó a la "artística" Isabel del joven monarca.

Con Anna Ivanovna, la princesa lo pasó aún más mal. Se instaló en Moscú y recibió una asignación extremadamente escasa.

La relajación se produjo sólo durante el corto reinado de Ivan Antonovich. Su madre, la gobernante Anna Leopoldovna, trataba bien a su tía alegre y bondadosa. Cuando se enteró de la inminente conspiración a favor de Isabel, consideró necesario hablar abiertamente con la princesa.

Sin embargo, esto sólo provocó a los conspiradores. La noche del 25 de noviembre de 1741 se produjo un golpe palaciego que elevó a Isabel al trono. La familia Brunswick (el joven emperador y sus padres) fue arrestada. Isabel se convirtió en una emperatriz autocrática.

Su primer paso y el más importante fue la abolición de la pena de muerte.

Bajo Isabel, se llevaron a cabo muchos eventos importantes para el país. En 1747 se abolieron las aduanas internas, lo que contribuyó seriamente al desarrollo del comercio en Rusia. En 1755 se inauguró la Universidad de Moscú. La política exterior del gobierno isabelino también fue exitosa. Rusia se alió con Francia y Austria y obtuvo una victoria sobre Prusia en la Guerra de los Siete Años de 1756-1763. Federico II perdió muchas de sus posesiones, Königsberg se convirtió en provincia rusa y había un gobernador general ruso en Berlín.

Oficialmente, Isabel no estaba casada, pero había rumores persistentes de que se había casado en secreto con A. G. Razumovsky, un ex cantante cosaco de la capilla de la corte. Diez años más tarde, I. I. Shuvalov, una de las personas más educadas de su tiempo, mecenas de M. V. Lomonosov, curador de la Universidad de Moscú y de la Academia de las Artes, se convirtió en su favorito.

Isabel nombró heredero a su sobrino Pedro (el futuro emperador Pedro III), hijo de su hermana Anna, fallecida temprano, que se casó con el duque Carlos de Holstein.

Los contemporáneos consideraban a Isabel una de las mujeres más bellas de Europa. Según los autores de memorias, Isabel se distinguía por un carácter difícil: era terriblemente supersticiosa y, en su presencia, temían tocar cualquier tema que no agradara a la emperatriz.

Sin embargo, el pueblo amaba mucho a la emperatriz y, cuando ella murió la noche de Navidad, el 25 de diciembre de 1761, la lloraron sinceramente.